La élite social de Puerto Plata en el siglo XIX no sólo desarrolló alianzas estratégicas en el orden comercial, sino que también emparentó sus familias, alcanzando a ser genearca o antepasada excepcional de redes de parentesco multiplicadas con el tiempo y el paso de las generaciones. Mucho antes de la burguesía nacional que se constituyó al amparo de la estabilidad política y los cambios económicos durante el régimen de Ulises Heureaux, ya en Puerto Plata se habían amalgamado inmigrantes, hijos de inmigrantes y nacionales dominicanos.

De sus vínculos iniciales a partir del comercio importador y exportador, los clubes sociales y el gobierno local, estos clanes pasaron a trabar una compleja red de relaciones familiares sobre la base de patrones matrimoniales endogámicos y, en algunos casos, consanguíneos, que contribuyó a reforzar su cohesión interna y a sostener en pocas manos variados intereses económicos, políticos y sociales en el transcurso de dos siglos. Sumados a los Cocco y los Brugal, que ya hemos desarrollado, los siguientes apellidos representan la más genuina expresión de la puertoplateñidad, forjada, como se descubre, a partir de la endogamia generacional:

• CASTELLANOS: Manuel Castellanos Marín (1836-1892) procreó sendas familias con Maria Vicenta Sáiz y María del Carmen Pelegrín De Windt (1848-1935). De los hijos de su segundo enlace, Luis Manuel Castellanos Pelegrín casó con Irene Dorville, y Aurelia Castellanos Pelegrín (1878-1946) casó con Carlos Felipe Morales Languasco, de cuya descendencia damos cuenta más adelante.  

• GINEBRA: El catalán José Francisco Ginebra Pou funda familia en Puerto Plata a partir de su matrimonio con Adelaida Pelegrín Thompson. Los Hurtado, Arzeno y Brugal sobresalen entre los entronques en esta familia.

De sus hijos, Augusto Ginebra Pelegrín casó con Dolores Marina Hernández Castellanos, procreando a Luis Augusto Ginebra Hernández (1911-2005), quien a su vez casó con María Isabel Hurtado Arzeno (1922-1996), hija de Pedro Hurtado Núñez y María Arzeno Gómez. Su tía Mercedes Ginebra Pelegrín casó con Diego Hurtado, mientras que otro tío, Federico Alfredo Ginebra Pelegrín (1868-1952) casó con Diana Arzeno Castellanos (1902-1967), hija de Felipe Arzeno Mella y María Castellanos Martínez. 

De los hijos de Federico Alfredo Ginebra Pelegrín, Alfredo Augusto Ginebra Arzeno (1925-2006) casó con Carmen Lucía Arzeno Brugal (1926-2015), hija de Luis Arzeno Heinsen y Lucía Brugal Pérez y Diana Adelaida Ginebra Arzeno (n. 1930) casó con Eduardo Andrés Brugal Alfau (1926-2008), hijo de Andrés Brugal Pérez y Dolores Alfau Rojas. El primo hermano de estos, Diego Hurtado Ginebra, hijo de Mercedes Ginebra Pelegrín, casó con Tenaida Antonia Brugal Muñoz (1923-2022), hija de Pablo Brugal Pérez y Hortensia Muñoz Nouel. De suerte que dos hermanos y un primo hermano casaron con tres primos hermanos. 

Otros casos de matrimonios de hermanos con primos hermanos son los de María Antonieta Hurtado Ginebra (n. 1910) y Carlos Rafael Hurtado Ginebra (n. 1928), hijos de Mercedes Ginebra Pelegrín, casados respectivamente con José Arzeno Heinsen (1908-1961), hijo de Luis Arzeno Abréu y Christian Heinsen Pickwood, y Altagracia Julia Heinsen Martínez (1929-1989), hija de Arthur Heinsen Pickwood y Altagracia Martínez Leroux.

En la generación subsiguiente tenemos que José Arzeno Hurtado (1937-2007), hijo de María Antonieta Hurtado Ginebra, casó con Roxanna Isabel Rafaela Villalón Hurtado (n. 1942), hija de Pedro Villalón Nuezí e Irma Hurtado Arzeno, y Camilo José Hurtado Casals (n. 1948) casó con Gloria Marina Imbert Román (n. 1951), hija de Gabriel Imbert Pimentel y Lourdes Román Díaz.