INSTITUTO DOMINICANO DE GENEALOGÍA, INC.

Cápsulas Genealógicas

en

SECCIÓN SABATINA DEL DIARIO Hoy

SÁBADO, 6 DE MARZO DE 2010

|<< INICIO<< AUTOR< ANTERIORCALENDARIOPOSTERIOR >AUTOR >>INDICE >>|

 

EL PRESBÍTERO JOSÉ EUGENIO ESPINOSA Y SUS ENTRONQUES SERRANOS

Preparado por Mario Julio Jáquez Torres

 

El presbítero José Eugenio Espinosa nació en Santiago el 15 de noviembre de 1799, siendo hijo legítimo de José Alejandro Espinosa y María del Pilar Sainz de Azcona. Fue bautizado en Santiago por el presbítero Juan Antonio Pichardo, siendo su padrino el presbítero Juan López, cura de la parroquia de Moca.

Fue doctor en Sagradas Teologías de la Universidad de Santo Domingo de Aquino. Salió del taller donde se formaron los Bobadillas, Regalado, Rodríguez y otras connotadas figuras del mundo eclesiástico de entonces. El 6 de agosto de 1826 recibió la ordenación sacerdotal de las manos del arzobispo monseñor Pedro Valera Jiménez y el 23 diciembre del mismo año le fue asignada la parroquia de San José de las Matas donde permaneció hasta el 28 de noviembre de 1835. De aquí pasó a La Vega, donde se integró a la causa de libertad.

Estando en esa ciudad, el presbítero Espinosa fue protagonista de su pronunciamiento a favor de la Independencia, el 6 de marzo de 1844, realizado por el comunicado trinitario Pedro Ramón de Mena, tocándole organizar la histórica reunión celebrada en el Ayuntamiento local donde quedó proclamada la adhesión de La Vega a la causa nacional. Recibió además al Padre de la Patria Juan Pablo Duarte el 25 de junio del mismo año, siendo destituido por esa causa del curato de La Vega por el arozbispo Tomás de Portes e Infante, opuesto al proyecto de los jóvenes trinitarios.

El 2 de noviembre del 1844 volvió a la parroquia de San José de las Matas. Esto no disminuyó su patriotismo ni su ideal de un país libre y soberano, ya que también sirvió durante la gesta restauradora, formando parte de la Junta de Gobierno establecida en Santiago y la cual presidió el prócer Benigno Filomeno de Rojas.

Así como grande fue su fervor patriótico, igual lo fue su ardua labor como sacerdote. Además de haber sido párroco de La Vega y San José de las Matas, también estuvo a cargo de la parroquias de San Fernando de Montecristi, desde septiembre de 1844 hasta el 1 de agosto 1845; de la ermita de San Lorenzo de Guayubín, del 24 de octubre de 1847 hasta el 6 de enero de 1852; de la ermita de San Ignacio de Sabaneta, del 20 de febrero de 1848 hasta 17 de septiembre de 1860, y de la ermita de Jánico, desde el 15 de septiembre de 1844 hasta el 21 de febrero de 1882. Fue vicario en Santiago de los Caballeros en 1859.

Como queda visto, el padre Espinosa fue párroco de San José de las Matas por un total de 48 años, en dos intervalos: desde el año de 1826 hasta el 5 de septiembre de 1836, y desde 1844 hasta su fallecimiento en el 1882. Acaso no haya existido otro cura que conociese mejor a sus feligreses, muchos de ellos sus parientes. En efecto, aunque nació en Santiago, el presbítero Espinosa estaba emparentado con los descendientes de los primeros pobladores que se establecieron en La Sierra. De aquí su vasto conocimiento sobre la genealogía de estas familias y la abundancia de dispensas de parentesco entre los feligreses de esa parroquia.

Su abuelo fue el escribano José Sainz de Azcona casado con Antonia López, de quien descienden todos los Azcona esparcidos en La Sierra y sus alrededores. Tío de su madre lo fue José López, casado con Isabel Ureña Valerio, tronco de los López de la región; vale acotar que de los hermanos de Isabel Ureña descienden todos los Ureña de la Sierra. Un tío materno del padre Espinosa, José Sainz de Azcona, estaba casado con María de las Nieves Rodríguez, hermana de José Rodríguez, quien había sido unos de los fundadores de San José de las Matas y uno de los firmantes de la petición de sus pobladores en 1810, para ser erigidos como “villa de españoles con cabildo”. Otra hermana de estos Rodríguez, María, estaba casada con Agustín Jáquez, hijo de Mariana San Pedro de Peralta, viuda de Jáquez, quien donó los terrenos para establecer la iglesia y el cementerio de San José de las Matas. Una hermana del cura, Petronila Espinosa, casó con Manuel Santelises, ancestro de todos los Santelises esparcidos por la región.

Fue en ese entorno de estrecha relación de parentesco que el padre Espinosa vivió en la Sierra, rodeado de feligreses de ferviente fe católica, impartiendo su amor a Dios, al prójimo, a la patria y a la libertad.

El 23 de febrero de 1882, en San José de las Matas, entregó su alma al Creador este gran sacerdote y prócer de la independencia. En su honor, una de las calles principales de ese pueblo lleva su nombre.


Fuentes Bibliográficas: 

Espínola, Jovino: Artículo, Seminario Nuevo Domingo

Godbout, Santiago: Historia Parroquia de San José de las Matas, págs. 42-43

González Hernádez, Julio Amable: Rosa Duarte: Su familia en sus apuntes, Cápsula genealógica del Instituto Dominicano de Genealogía, 20 de febrero del 2008

Jáquez Torres, Mario Julio: Investigaciones Genealógicas, 2008

La Voz de Santiago, 23 de febrero de 1882

Sáez Ramo, José Luis: La Iglesia Católica y el liberalismo en la República Dominicana, dominicanos.blogspot.com, 20 de febrero del 2008

|<< INICIO<< AUTOR< ANTERIORCALENDARIOPOSTERIOR >AUTOR >>INDICE >>|