De momento, haremos hincapié en Pedro de Garavito, quien tomó por esposa a María Villela de Sanabria, hija del regidor alcantarino Juan Fernández de Sanabria y de Urraca González Maldonado. El matrimonio procreó tres hijos: Pedro de Sanabria (San Pedro de Alcántara, estudió leyes en la Universidad de Salamanca y tomó, en 1515, el hábito de fraile descalzo en el convento de recoletos de Majarretes. Fue beatificado por Gregorio XV, el 18 de abril de 1622 y canonizado por Clemente X, el 5 de mayo de 1670), García Garavito y María Villela. (Libro Primero de la portentosa vida del penitente, admirable y contemplativo altísimo San Pedro de Alcántara. Imprenta de Manuel Fernández. Madrid, 1736 y rodríguez moñino, A. El testamento de la madre de San Pedro de Alcántara. “Revista de Estudios Extremeños”, vol. 25, núm. 3, 1969. Págs. 563-569).

Una probanza instrumentada en Plasencia, el 22 de septiembre de 1565, ante el corregidor Ponce Porcel de Peralta, sostiene que el segundo de los hijos de Francisco de Aguilar y de Leonor de Torres, llamado Alonso de Aguilar Garavito, “alto, de cuerpo moreno”, había nacido cerca del año 1538, incursionado en la carrera militar hasta alcanzar el grado de capitán y participado en las tristemente célebres “jornadas de Inglaterra” (arias de quintanadueñas, Jacinto. Antigüedades y santos de la muy noble villa de Alcántara. fol. 149 r) que dieron al traste, en 1588, con la grande y felicísima armada lanzada por Felipe II contra las costas británicas.

De acuerdo con otras fuentes, había desposado a María Bernáldez, hija de Hernando Bernáldez, metellinense, avecindado en Plasencia y de Beatriz Álvarez de Contreras. Esta era, además, hermana del licenciado Lorenzo Bernáldez de Lorca, reputado por hijo de conversos, quien ejerció numerosos oficios en el distrito de la audiencia de Santo Domingo; destacó por su valor en combate contra Hawkins, Drake, Lope de Aguirre y el negro alzado Juan Vaquero e instituyó, en 1576, un mayorazgo junto a su esposa Felicitas Herrera y Mujica.