INSTITUTO DOMINICANO DE GENEALOGÍA, INC. |
Cápsulas Genealógicas |
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SECCIÓN SABATINA DEL DIARIO Hoy |
SÁBADO, 19 DE MARZO DE 2016 |
HINCHA Y LOS APELLIDOS DEL SUR (7 de 7) |
Preparado por Leonardo Díaz Jáquez |
Llegando a los apellidos correspondientes a las últimas letras del abecedario, encontramos que del matrimonio de Manuel de Vargas y Nicolasa Reynoso existen los registros del bautizo de cuatro de sus vástagos. Son ellos: Juan, nacido el 30 de agosto de 1788, habiendo sido su padrino María Montes de Oca; le echo agua Gregorio, hijo legítimo de Domingo Montes de Oca y Tomasa de Vargas, mientras que lo sostuvo en ese acto, María, hermana de Gregorio, (libro 4, folio 67, s/n acta, 1 de octubre de 1788); Nicolás, nacido el 8 de agosto de 1793, fueron sus padrinos don Manuel de Castro y María Concepción Fragoso, su consorte, (libro 4, folio 126, s/n acta, 8 de noviembre de 1793); Manuel, nacido el 24 de mayo de 1794; fue su madrina Manuela Reyes, (libro 4, folio 133, s/n acta, 8 de junio de 1794), y María Dolores, nacida el 11 de abril de 1791, la madrina fue Catalina de Castro, (libro 4, folio 97, s/n acta, 12 de mayo de 1791). Del matrimonio de Pedro Vásquez, Ana de la Cruz Hernández están los bautizos de dos de sus hijos: Felipe, nacido el 24 de julio de 1782, habiendo sido su padrino Marcos Cabral, (libro 4, s/n folio, s/n acta, 29 de julio de 1782), y Manuel, nacido el 21 de mayo de 1788, habiéndolo llevado a la pila bautismal Victorino de la Cruz, marido de Margarita Muñoz y Josefa Solen, viuda de Julián Villavisencio, (libro 4, folio 61, s/n acta, 1 de junio de 1788). Fruto del matrimonio de Pedro Vicioso y Lucía de Medina existen cinco bautizos, a saber: Margarita, nacida el 25 de octubre de 1784, habiendo sido sus padrinos Pedro Peralta y Juana de Medina, (libro 4, folio 27, s/n acta, 6 de noviembre de 1784); Trinidad, nacida el 7 de junio de 1786; le echo agua el doctor, don Bernardo Correa y Cidrón, sacristán mayor y la sostuvo en el acto Simona de Medina, hermana de Lucía, (libro 4, folio 44, s/n acta, 18 de junio de 1786); José Ramón, nacido el 8 de enero de 1789, habiendo sido su madrina Simona de Medina. Le echó agua Luis Francisco de Figueroa y lo sostuvo en el acto Simona de Medina, mujer legítima de Nicolás Milano, (libro 4, folio 72, s/n acta, 19 de enero de 1789); Juan, nacido el 1 de octubre de 1792, habiéndolo llevado a la iglesia su madrina María de Medina, (libro 4, 106, s/n acta, 5 de enero de 1792), y María Gregoria, nacida el 24 de abril de 1794, habiendo sido su madrina Juana de Medina, (libro 4, folio 132, s/n acta, 8 de mayo de 1794). Manuel Vicioso y Tomasa Díaz nos legaron los registros de cuatro de sus hijos: Francisco, nacido el 9 de marzo de 1786, habiendo sido su madrina Agustina de Luna, (libro 4, folio 41, s/n acta, 21 de marzo de 1786); Inés, nacida el 28 de abril de 1789, habido sido su madrina Agustina de Luna, (libro 4, folio 75, s/n acta, 13 de mayo de 1789); Gerónima, nacida el 30 de septiembre de 1791, habiendo sido su padrino Juan Guzmán, mientras que le echo agua Gabriel Díaz y la sostuvo Josefa Díaz, (libro 4, folio 103, s/n acta, 16 de noviembre de 1791), y Micaela, nacida el 15 de junio de 1794, habiendo sido sus padrinos Juan Guzmán y María Montiel; le echó agua José Gabriel Díaz, (libro 4, folio 136, s/n acta, 6 de agosto de 1794). José, hijo legítimo de Fulgencio Vicioso y Beatriz Díaz, nació el 11 de octubre de 1787, habiendo sido su padrino el teniente don Bartolomé de Medina y le echo agua Blas de Mella, (libro 4, folio 55, s/n acta, 5 de noviembre de 1787). Juan Pedro Vicioso y Francisca de â Costa fueron los padres de Anastasio, nacido el 30 de abril de 1794, habiendo sido su madrina Juana Cuello y le echó agua Pedro Nolazco, (libro 4, folio 136, s/n acta, 7 de agosto de 1794). Tiburcio, nacido el 15 de abril de 1782 era hijo legítimo de Félix Vidal y Feliciana Araujo, habiendo sido su madrina María de Luna, (libro 4, s/n folio, s/n acta, 26 de abril de 1782). Eugenia, nacida el 16 de abril de 1786, hija legítima de Gerónimo Vidal y María Romero, habiendo sido su padrino Felipe González, (libro 4, folio 42, s/n acta, 28 de abril de 1786). Del matrimonio de José Vidal y Gregoria de Luna existen los registros bautismales de cinco de sus hijos. Son ellos, Ramona, nacida el 30 de agosto de 1788, habiendo sido su madrina Juana Vidal, mujer legítima de José Medina, (libro 4, folio 66, s/n acta, 10 de septiembre de 1788); María Telesfora, nacida el 5 de enero de 1790, habiendo sido sus padrinos José Medina y Juana Vidal, su mujer, (libro 4, folio 83, s/n acta, 18 de enero de 1790); Juan, nacido el 16 de julio de 1791, habiendo sido su madrina doña Ana Martín Fajardo, (libro 4, folio 99, s/n acta, 27 de julio de 1791); José, nacido el 25 de septiembre de 1792, habiéndolo llevado a la pila bautismal don Manuel de Aybar y Josefa Perdomo, (libro 4, folio 115, s/n acta, 9 de octubre de 1792), y Gregoria, nacida el 9 de mayo de 1794, habiendo sido su madrina Francisca Interial Padilla, (libro 4, folio 133, s/n acta, 30 de mayo de 1794). Del matrimonio formado por Francisco Vidal y Mariana de Medina hay evidencias de dos hijos: Domingo, nacido el 20 de octubre de 1789, habiendo sido su madrina Rosa Bejarano, mujer de Vicente Valerio, (libro 4, folio 82, s/n acta, 31 de diciembre de 1789) y Manuel de la Encarnación nacido el 25 de marzo de 1793, habiendo sido sus padrinos Manuel Castillo y María Medina, (libro 4, folio 122, s/n acta, 6 de abril de 1793). El punto final a esta serie lo ponen los hijos de Francisco Viola y Felipa de la Cruz. Son ellos María Magdalena, nacidos el 17 de octubre de 1784, habiendo sido su madrina María Josefa Galón y le echó agua el doctor don Bernardo Correa y Cidrón, (libro 4, folio 27, s/n acta, 31 de octubre de 1784), Petrona, nacida el 30 de enero de 1787; su padrino lo fue el doctor don Bernardo Correa y Cidrón, (libro 4, folio 49, s/n acta, 8 de febrero de 1787). Aunque solo se cuenta con el libro 4 de bautismos de Hincha como exponente de sus registros parroquiales y pese a que este abarca poco más de un decenio, sus 1,383 actas permiten adentrarnos en el conocimiento, así sea fragmentario, de aspectos de su vida cotidiana, las relaciones de consanguinidad y fraternidad entre sus habitantes y el rico entramado genealógico al que las generaciones registradas en ellas darían lugar ya entrado el siglo XIX. |