El recién pasado 23 de octubre,  la columna “Cápsulas Genealógicas”, que sale a la luz pública en el suplemento Areíto del periódico Hoy, cumplió su cuarto aniversario. Hasta el presente se han publicado 195 trabajos en torno a genealogía dominicana, los cuales pueden ser accesados consultando la dirección  http://www.idg.org.do

En estos cuatro años, los temas tratados han sido muy diversos. Entre ellos podemos citar el referido a personajes históricos dominicanos sobre los cuales se ha estudiado su genealogía, tales como Concepción Bona, Enrique Jiménez Moya, Braulio Álvarez Castillo, Demetrio Morales, Eustaquio Ducoudray Villavicencio, Joaquín Balaguer, Yoryi Morel, Carlos Rafael Goico Morales, Pilar Fortún, Juan Bosch Gaviño y Rafael Leonidas Trujillo.

Personajes históricos no dominicanos con alguna incidencia en nuestro país, también han sido abordados. Entre ellos, Simón Bolívar, Jean Pierre Boyer y Alejandro Dumas.

El fenómeno migratorio siempre es de interés para los genealogistas. Se trataron las migraciones de los españoles a San Pedro de Macorís, los puertorriqueños a Santiago y los catalanes a Montecristi, al igual que los judíos y los árabes.

Toda la bibliografía genealógica dominicana publicada a la fecha fue descrita, al tiempo que se dieron a conocer reseñas sobre las obras “Mario Penzo Fondeur: una vida dedicada a la ingeniería”, de Mario Augusto Penzo Pichardo; “Historia Social de Santiago de los Caballeros, 1863-1900” y “Manuel de Jesús Tavares Portes en el centenario de su fallecimiento, 1906-2006”, estas dos últimas de Edwin Espinal Hernández, actual presidente del Instituto Dominicano de Genealogía.

Personajes relevantes de la colonia no quedaron fuera. Se escribió sobre Rodrigo de Bastidas, Gonzalo Fernández de Oviedo y la familia Dávila.

El tema más ampliamente tratado fue el de familias dominicanas. Sobre estas podemos señalar trabajos acerca de los apellidos Bermúdez, Llenas, Fondeur, Franco Bidó, Otto Duvergé, Coste, Pellerano, Imbert, Arzeno, Knipping, Báez, Borrell, Saleta, Llinás, De la Maza, Logroño, Menicucci, Rancier, Batlle, Machado, González, Marchena, Febles, León, Sagredo, Sicard, Ortea, Loinaz, Gómez Alfau, Moore, Read, Haché, Soto, Bencosme, Morales, Nadal, Pepén, Morel, Morell de Santa Cruz, Bernal, Alfau, Estévez, Tiburcio, Soñé, Velásquez, Julia y Díaz.

Las fuentes para la investigación genealógica también fueron abordadas en entregas sobre protocolos notariales, cementerios, tradición oral, genealogía digital, la matrícula de Segovia, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Ultimos Días y los censos.

Trabajos de teoría genealógica también fueron presentados y cubrieron vínculos y grados, metodología de investigación, títulos nobiliarios, conteo de ancestros, mitos y pruebas de filiación.

Se publicaron dos series. Una primera, titulada “Descendencias sacerdotales”, en la cual se revelaron los hijos procreados por los prebísteros Domingo Antonio Solano, Valentín Morales, Bernardo Pichardo Betancourt, Gabriel Moreno de Christo, Fernando Arturo de Meriño, Eliseo Bornia, José Napoleón Andrickson, Pedro Pablo Báez González (Pin) y Carlos Rafael Nouel Pierret. 

La segunda serie, “Toponimia y genealogía”, resaltó la vinculación entre el nacimiento de sectores de la ciudad de Santo Domingo y sus promotores y su entorno familiar. Esta cubrió la ciudad intramuros, Güibia, Gazcue, Marcos Polo, La Aguedita, La Primavera, Villa Francisca, Villa Consuelo, Villa Juana, Galindo, Barrio de Mejoramiento Social, Ensanche Molinuevo, Alma Rosa, Piantini y Evaristo Morales. 

Particular interés tuvieron amplios trabajos documentados sobre la parentela del patricio Juan Pablo Duarte, en los que se estableció su no vinculación con otra familia Duarte del país.

Otros temas presentados fueron los relativos a familias de pueblos. Estos cubrieron Constanza, San José de las Matas, Santiago y San Francisco de Macorís.

Con esta columna, el Instituto Dominicano de Genealogía cumple con sus objetivos de realizar, impulsar y difundir investigaciones genealógicas en nuestro medio. Agradecemos el favor de nuestros lectores y de todos aquellos interesados en el conocimiento de nuestras raíces.