El origen de la familia Bisonó
en nuestro país, según la tradición oral que ha llegado hasta
nuestro días, se remonta a dos hermanos apellidados Bisoneaux o
Bisonette, oficiales de alto rango del ejército de Napoleón
Bonaparte, que llegaron a la isla desde Francia con las tropas
del general Charles Victor Emmanuel Leclerc, esposo de Paulina
Bonaparte, hermana del emperador francés Napoleón Bonaparte,
para resolver el conflicto desatado a raíz de la revuelta de los
esclavos en Saint Domingue, hoy Haití.
El ejército más temible y mejor
preparado en su época recibió una humillante derrota, en la que
perecieron más de 50 mil franceses, incluyendo el propio Leclerc,
a manos de los haitianos. Muchos de los sobrevivientes del
ejército galo pasaron a la parte española de la isla, que luego
del Tratado de Basilea, había pasado a manos de Francia. En
efecto, muchos de estos soldados dejaron descendencia en nuestro
país.
En el caso de los dos hermanos
Bisoneaux o Bisonette, de acuerdo siempre a la historia
familiar, estos casaron con dos hermanas apellidadas Checo,
nacidas en España, variando su apellido a la forma españolizada
de Bisonó y estableciéndose en el interior de la isla, debido a
las turbulentas opresiones políticas de la época: uno en
Navarrete y el otro en San José de las Matas, ambas comunidades
de la provincia de Santiago, en donde procrearon familias, cuyos
descendientes esparcieron el patronímico Bisonó por todo el
país.
Pero resulta que el apellido
Bisonó existía en nuestra isla desde mucho antes de la llegada
de las tropas de Leclerc el 9 de enero de 1802. Dos documentos
así lo confirman. María Josefa Bisonó, hija de Pedro Bisonó y
María Josefa L'Amour, casada con José Goris, murió a los 115
años de edad el 19 agosto de 1896 en San José de las Matas,
conforme su acta de defunción, marcada con el número 51 del
Libro 4 de Defunciones de San José de las Matas, por lo que
nació hacia 1781. El segundo documento que ratifica este aserto
es el acta de nacimiento de Jean Baptiste Visouneau, hijo
legítimo de D'Ander Visouneau
—al
parecer la ortografía correcta—
y Rose Bigot, venido al mundo el 22 de febrero de 1722 en Bayajá,
Saint Domingue (colonia francesa de Santo Domingo).
De la ascendencia francesa del
apellido no quedan dudas si nos acogemos al acta de defunción de
Juan Bisonó, fallecido en San José de las Matas el 26 de diciembre
de 1817, quien figura registrado como nacional francés y
esposo de María Framingdano. Dicha acta es la número 30 del
Libro Primero de Defunciones de San José de las Matas.